Yuk-mi

Valencia
nov/14
Precio: 20€

Nos puso en la pista una entrada de la mejor revista digital que hay en este momento, Verlanga, http://verlanga.com/paladar/bocados-verlanga/bibim-bap-en-yuk-mi/ y como no he estado nunca en ningún restaurante Coreano, pues allá que nos fuimos. No sé cuál es el ambiente en otros momentos, pero ese sábado por la noche fue horrible. De barucho, dos mesas contando la nuestra y humo, mucho humo, tanto que la ropa al día siguiente parecía salmón. La señora que nos atiende, nos aconseja amablemente. Y comemos. Cosas realmente ricas, no se dejen engañar por la vista amigos. Y eso que arriesgamos poco, por aquello de no quedarnos sin cenar. Maravillosos los fideos de boniato, buenísimas las empanadillas de carne,  muy rico (aunque frio) el arroz Bibim Bap y sabroso el pollo. Nula carta de cervezas y vinos.  Pues eso, un sitio donde la comida está brutal, pero el ambiente te deprime.

Tora, taberna

Valencia
oct/14
Precio: 20€


Mola que te cagas.  Ambiente informal, un local sin lujos pero acogedor y buena comida. Magníficos los makis de atún, pollo crujiente con muy buen sabor y unos Yakisoba que ya quisieran muchos japos. Huir de los postres, con el Taiyaki recalentado al micro podías jugar a “pilota” directamente. Y el té de arroz, solo para quien lo conozca.  Precio asequible.  
 Recomendable sin duda alguna.

La Salita

Valencia
dic/13
Precio: 40€ (bebidas aparte)

Hacía mucho tiempo que no me ilusionaba tanto con la visita a un restaurante. Es cierto que una visita al Quique Dacosta me hubiera quitado el sueño, pero la pasta que vale siempre me echa para atrás. Demasiado caro para mi bolsillo.

Varios amigos y compañeros me habían hablado de este restaurante con anterioridad al programa de tv. Ni puto caso que soy muy rarito con esto de la comida y no suelen acertar con sus recomendaciones. Sin embargo, ver trabajar a esta mujer ha sido una auténtica delicia y programa tras programa se me iba despertando el interés por su cocina. EL caso es que llamamos para reservar y solo les quedaba una mesa para el mismo viernes de la resolución del mismo: ¡Perfecto!

Y llegó el día. Lo primero que te llama la atención cuando te sientas es que no hay carta, solo un prometedor menú. Creo que esto es un problema muy serio, por lo menos la primera vez que vas. Deberían avisarlo cuando uno llama para hacer su reserva. Entiendo que gracias a ello puede ofrecer un precio imbatible, pero la idea de menú largo/corto al estilo de Joaquin Smith me parecería muy acertada. Por no hablar del tema niños.

El salón es acogedor, con una iluminación íntima pero suficiente. Mesa elegantemente vestida,  sin grandes lujos. La carta de vinos es muy interesante. Nos animamos con un Riesling de Alsacia, que resultó soberbio. Copas Stolzle de gama baja y vajilla del Ikea, no voy a decir que sea fea (es la misma que tengo yo en casa) pero narices, llama mucho la atención.

Los platos son presentados con un ritmo ideal, sin prisa pero sin pausa, van desfilando divertidas propuestas llenas de sabor y originalidad. Los matices, los contrastes, siempre son bien recibidos y los platos tienen un sabor magnífico en cada cucharada. No me voy a poner a detallar los platos. Si te gusta la propuesta, acércate a probarlo cacho perro/a, que por cuarenta ecus no te pueden dar ni más, ni mejor.

Mi opinión es que no conozco ningún restaurante donde uno pueda disfrutar de la gastronomía moderna por este precio: Originales presentaciones, sabores contundentes y atractivas propuestas. Ambiente agradable e informal para disfrutar de una propuesta cojonuda por un precio rompedor. Abstenerse consumidores habituales de melosos de bogavante congelado, esto no es para ellos. Es para gente que disfruta de la sorpresa y la innovación. 

Felicidades, volveremos.